La productora santandereana Índigo Cinema lanzará en 2024 un cortometraje sobre La Comuna 14 de Bucaramanga. Con una idea sencilla, pero poderosa y profunda, cuenta la historia de un grupo de jóvenes de clase media que se encuentra en un barrio intentando capturar a través de una cámara lo que para ellos es la realidad circundante, hasta que sucesos imprevistos ocasionan que la atención del lente se redireccione para conocer, por estos cineastas, una perspectiva ignorada sobre la verdad del entorno.
Índigo Cinema es conocida por producciones como “La Fortaleza”, documental ganador del Premio Macondo del público en 2021. Además, la empresa santandereana, en cabeza de Andrés Torres, fue ganadora del estímulo para la creación de cortometraje que ofrece el Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga (IMCT), proyecto con el cual están haciendo posible la producción de “La Toma”, una idea que se ha trabajado desde hace tres años y que se empezó a rodar en noviembre de 2023.
Retratar la idiosincrasia bumanguesa es un aspecto muy evidente de la productora. Esta característica no se pierde con la ficción en “La Toma”, pues según cuenta Alejandra Martínez, productora creativa del proyecto, la propuesta desde producción se conoce como cine comunitario: “Donde construimos la historia entre todos y todas”. Por ejemplo, para “La Toma” se presentó la idea a la comunidad y se fue transformando, personalizando y fortaleciendo hacia caminos que proyectan mejor la realidad. Debido a las diferencias entre el cine comunitario e industrial (que es el que se acostumbra a ver), la realización y rodaje mismo presentan ideas contrapuestas a lo tradicional. Desde la idea hasta su materialización, tanto detalles técnicos como tiempos de grabación, los productores deben pensar que “Es mejor ir al paso del más lento”, para dar a entender que la producción, desde la línea de lo comunitario, adopta dinámicas de la comunidad y se adapta a esta.
Es un logro para Índigo Cinema que la producción cuente con más actores de la comunidad que externos. Personajes de barrios como Albania, Morrorico, Buenos Aires, Miraflores, Limoncito, algunos de los cuales adaptan sus papeles de la vida cotidiana a la pantalla. Sea mototaxista, peluquera, mesera, zapatero, en fin, son personas que, a través de los talleres llevados a cabo este año en el marco del proyecto, se aventuraron a mostrar su talento.
“Hacerlo posible” es un logro
“La Toma” fue una idea de Charly Galván, integrante de Índigo Cinema, a partir de una experiencia propia. Para Alejandra es satisfactorio ver cómo se brindan oportunidades para que se ejecuten ideas tan increíbles como esta en la industria del cine local. Así mismo, está agradecida con la comunidad por hacer posible una real inclusión en la producción, debido a que el mismo filme critica en su mensaje al utilitarismo en rodajes donde se pretende involucrar una comunidad, pero no se logra realmente. La idea era que “Ellos se sintieran apropiados de la historia: que tuvieran voz, voto y decisión frente a cómo se iba a contar. Que ellos y ellas sientan que están incluidos”, menciona Alejandra.
La relevancia del proyecto desde sus dos públicos objetivos, comenta la productora creativa de Índigo Cinema, se basa en, primer lugar, la identificación de los miembros de la comunidad con el producto audiovisual. “Que las personas puedan tener la oportunidad de verse en la pantalla, un poco también dignificar su vida, su camino y mostrar que también pueden estar allí”. Su segundo propósito es que la película llegue con su crítica al público para cuestionar la forma en la que se hacen las cosas en la industria, eso que a veces se llama “Cine comunitario”, pero que invalida las ideas de la misma comunidad.
Desde Revista Enredarte los invitamos a que sigan de cerca el trabajo de Índigo Cinema y estén expectantes del lanzamiento del filme “La Toma”, que podría llegar a demostrar lo poderoso que es el cine comunitario realizado en Santander.
