Reseña de “La muerte de Iván Ilich” de León Tolstói, una historia sobre una vida superficial y vacía

“La muerte de Iván Ilich” de León Tolstói, una historia sobre una vida superficial y vacía

“La muerte de Iván Ilich” comienza con el final: el funcionario judicial Iván Ilich ha fallecido y en su funeral se confirman sus miedos terrenales. Él vivía una existencia llena convencionalismos sociales: naces, creces, te casas, tienes hijos, un trabajo estable y con ascensos, una casa bonita. Es decir, Iván Ilich era un hombre de la pequeña burguesía que convivía pacíficamente entre la sociedad, sin más ni menos.

Iván Ilich sentía que moría y se preocupaba mucho. En lo más recóndito de su alma sabía que estaba sucumbiendo, sin embargo no sólo no lo aceptaba, sino que no lo comprendía. León Tolstói

“La muerte de Iván Ilich” de León Tolstói, una historia sobre una vida superficial y vacía
León Tolstói, una de las mayores figuras de la literatura rusa del siglo XIX. Foto tomada de Internet

Sus miedos terrenales llegan cuando ve acercarse a la muerte. Un día, Iván Ilich sufre un pequeño accidente y, desde ese momento, siente que su muerte se aproxima. Él cae desde una escalera hasta el suelo, igual que su vida en próximo declive: la cumbre del éxito profesional y social va revelándose como superficial. Es entonces cuando ve la verdad frente a sus ojos: su vida ha estado plagada de mentiras, ha tenido una existencia vacía. Su familia no lo quiere, sus amistades son falsas. Tal vez el único momento en que realmente ha sido feliz, fue en su infancia.

Durante aquel tiempo de soledad, acostado con el rostro hacia el respaldo del sofá, en medio de una ciudad populosa y de numerosos amigos, y con su familia, y sin embargo en la soledad como no era posible hallarla en ninguna parte, ni en el fondo del mar ni sobre la tierra, durante el último tiempo de aquella terrible soledad, Iván Ilich vivió exclusivamente con la imaginación puesta en el pasado. León Tolstói

“La muerte de Iván Ilich” de León Tolstói, una historia sobre una vida superficial y vacía
Foto tomada por Daniela Bautista (Revista Enredarte)

Se trata de una novela llena de preguntas existenciales, en la que su protagonista reflexiona sobre la superficialidad de la sociedad, un modo de vida cimentado en falsedades y la importancia de vivir plenamente. Ahora, arrepentido, Iván Ilich teme a la muerte —especialmente por el hecho de no tener tiempo de corregir sus errores— y le repugnan aquellos que solo se acercan por guardar apariencias, sintiendo menos soledad gracias a la única persona que siente real: el sirviente Guerásim. ¿Será que Iván Ilich pudo ver luz en sus últimos días?

La Revista Enredarte los invita a conocer una de las novelas cortas de uno de los escritores rusos más importantes de la historia, León Tolstói.

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