Juego de Tronos desde otros ángulos

GOT es uno de los ejemplos más sonados de transmedia a nivel mundial. Esta serie creada en 2006 y cuyo primer episodio se estrenó en abril del 2011 es Estados Unidos y Canadá ha vuelto locos a sus fanáticos los cuales han empezado a generar diversas clases de contenidos transmediales sobre un mismo tema, llevando GOT a otro nivel. “Game of Thrones —llamada Juego de Tronos en España— es una serie de televisión de drama y fantasía medieval creada por David Benioff y D. B. Weiss y producida por la cadena HBO. Su argumento está inspirado en la serie de novelas Canción de hielo y fuego, escrita por el estadounidense George R. R. Martin, y relata las vivencias de un grupo de personajes de distintas casas nobiliarias en el continente ficticio de Poniente para tener el control del Trono de Hierro y gobernar los siete reinos que conforman el territorio”.

Esta serie que comenzó como libro y poco a poco ha ido ahondando en nuevas formas de continuar navegando por la era digital, es el tema que hemos elegido como grupo porque además consideramos que el impacto cultural que ha tenido en la sociedad y sobre todo en todo lo relacionado con lo “fantástico” en cuanto a género visual, audiovisual, sonoro y literario, es gigante.

En este sentido, hoy queremos compartir con todos nuestros lectores 3 productos transmedia realizados por artistas santandereanos sobre esta fantástica serie.

  1. Spin Off – Arya Stark
  2. Podcast sobre por qué GOT cambió la forma de ver series en el mundo
  3. Infografía para entender mejor esta serie
 

Spin Off – Arya Stark

 

 

Arya Stark continúa su rumbo luego del final de GOT. Imagen: RPP Noticias

Por: Andrea Salazar

Un alma aventurera, un carácter voluntarioso y un impulso heroico, llevaron a la Pequeña Arya Stark, hija menor de Lord Eddard Stark y Lady Catelyn Stark, quien toda su vida se encargó de educarla para ser una dama, a marcar un viaje que significa la materialización de todos sus sueños.

Desde su infancia, Arya siempre ha estado atraída por cuentos y leyendas llenos de misterios, odiseas y riesgos en los que el hombre ha sentido la aspiración vital de adentrarse en las vastas aguas, ya sea para librar batallas o para explorar nuevos horizontes. Así mismo, admiraba las figuras del pasado como Elissa Farman, quien tuvo el mismo espíritu navegante y pasó toda su vida en una larga travesía por el mar.

En este contexto, se hace importante mencionar que el mundo de Juego de Tronos está basado en el viejo continente, poniente es como si fuera Gran Bretaña en los tiempos medievales y el misterio de no saber qué había después del oeste inquietaba a los conquistadores, era un recurso literario usado para crear relatos de aventura y además los expertos en cartografía de la época creían que después de la Isla de la Luz Solitaria había un paraíso y que quienes zarpaban hacia allá jamás retornaban, en este orden de ideas, Arya cultivó en su corazón la intención por llegar hasta el fin del mundo.

Tras haber sobrevivido a la tragedia que sacudió a Invernalia y ser definido el destino de su familia, se preparó para llevar a cabo su plan, el cual nunca fue un secreto y consistía en navegar hacia el oeste de Poniente, más allá de lo que nadie ha navegado, abandonar el urdimbre de los Siete Reinos y toda hipótesis de ser un heraldo de la muerte, fue una señal para cerrar un ciclo y abrir un sinfín de posibilidades para el futuro, ya que de este modo podría desentrañar muchas inquietudes, entre las cuales ¿qué pasó con la tripulación de Elissa Farman?, ¿la tierra es redonda?, ¿hay un lugar en el que no llega el invierno?… una aventura que, muy bien conoce, trae como consecuencia no volver nunca a su hogar.

Tras despedirse con tristeza de Jon y prometerle recordarle por siempre, se aferra a Needle, su espada, prepara el barco y da la orden para zarpar.

Al principio, todo parecía ser un alivio… En el corazón de Arya no había duda de que navegar hacia lo desconocido sería poner a prueba su capacidad para sobreponerse ante lo adverso, demostrar su inteligencia y sentido de la vida, así que estaba dispuesta a todo y a nada.

No se sabe con certeza cuánto tiempo duró la exploración de Arya, lo que sí se reconoce es que hay varios folcloristas, como yo, tratando construir su bitácora con la intención de descubrir si finalmente dio respuesta a este enigma… En todo caso, aquí me atrevo a contarles una de las tantas tormentas, quizá la más cobarde, porque al pensar en ella, viene a mi una imagen de una guerrera que no le tiene miedo a nada, sin embargo durante dicha travesía, bien es cierto que ella y su tripulación pasaron mucho tiempo en el mar sin divisar tierra alguna, lo cual aumentó la pesadumbre entre los marineros por las precarias condiciones de vivir en un barco al dormir al aire libre, soportar el mal olor y consumir comida en estado de descomposición.

A leguas se podía inferir que La Niña Fea no iba a cumplir con su cometido, hasta que la naturaleza quiso hacer de las suyas, de un momento a otro, el barco comenzó escorarse, las olas se empinaron sin piedad, las nubes galopaban por el firmamento baqueteadas por las descargas eléctricas que cruzaban con furia hacia todas las direcciones. El cielo en todo su esplendor era tan semejante a un campo de batalla que meteorológicamente anunciaba el fin.

Alucinados por los relámpagos, Arya y sus tripulantes se aferraron a la embarcación, trataron de mantener la calma y en silencio permanecieron como si aquella oración íntima en medio de la nada los fuera a sacar de la boca del lobo.

Cada estruendo que rajaba el cielo atizaba el terror en la nave, las olas calaban casi por completo la cubierta destrozando a su paso toda artimaña de seguridad, en verdad, estaban encarando a la fuerza del universo sobre sus hombros y navegando a pantocazos adjudicaron a la suerte y se quedaron dormidos.

A la mañana siguiente, el panorama fue distinto, Egil, uno de los marineros, al sentir el calor del sol sobre su cara de sobresalto se despertó y exclamó con fuerte voz ¡Viva tierra!, Arya, llena de sorpresa, sin dudarlo dio la orden de levar anclas y dirigirse hasta allá.

El alivio para todos llegó cuando finalmente pudieron tocar arena firme, completamente cansados y con la intención de escarbar hasta la última piedra, se repartieron para requisar el lugar, algunos dicen que allí se encontraron con un gran Kraken, otros dicen que encontraron restos de humanos (posibles descendientes de la tripulación de Elissa) y hasta una nueva civilización equivalente a las Américas, donde los aborígenes tenían grandes imperios.

Lo que sí es cierto, es que nadie que haya intentado atravesar el mar del Atardecer en la historia de Poniente y los Siete Reinos ha regresado para contarnos que hay más allá. Arya puede ser la primera persona que abre la puerta a este nuevo mundo y yo apenas tengo un breve comienzo de lo que pudo ser el viaje de ella por el océano incierto.

PODCAST: 
GOT cambiando la forma de ver 
series en el mundo

 

 

Por: Juan Camilo Salcedo


Infografía

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